Miles de jóvenes se congregan en la Plaza Mayor para
celebrar anticipadamente el fin de año con motivo de la Nochevieja 2011
Las
temperaturas eran muy bajas aunque el
ambiente estaba en ebullición la pasada madrugada en la plaza Mayor. Casi 40.000 jóvenes celebraron la Nochevieja por
anticipado recibiendo el 2012 con cava, villancicos y mucha fiesta. Eso así,
las uvas se quedan para el 31. Solo
había gominolas.
Salamanca,
tal como se conoce, es una ciudad universitaria. La mayor parte de los
estudiantes provienen de otros lugares de la península, incluso gente
extranjera. Este hecho propició la
aparición de la costumbre de la Nochevieja Universitaria
, cuando aproximadamente diez años atrás un grupo de amigos decidió juntarse
para desperdir juntos el año antes de marcharse cada uno a su casa en las
fiestas navideñas y celebrar así el día de fin de año.
Al año
siguiente, el mismo grupo organizó una fiesta en colaboración con varios bares de la ciudad. Dos después,
logró reunir a 5.000 jóvenes en la Plaza Mayor.
Posteriormente esta fiesta se ha ido haciendo una tradición con un éxito
explosivo. Después de un año de interrupción (en 2009 se realizó en Zamora), la fiesta más conocida
de Salamanca volvió a arrasar en la cuidad con la asistencia de más de 35.000
participantes en 2010. Este año, como en los anteriores, la Plaza Mayor salmantina
se llenó de grupos de jóvenes de distintas procedencias.
Lo que desde
fuera puede parecer un macrobotellón, porque el consumo de alcohol está
garantizado y es casi hasta una finalidad del acto, es, sin embargo, una fiesta
capaz de mover voluntarios, la Policía Local y los servicios de
limpieza, para que todo discurriera con normalidad.
La despedida del año
2011
La Nochevieja Universitaria de 2011 comenzó a celebrarse a primeras horas de la tarde, cuando empezaron a llegar en autobuses personas de diferentes lugares como
Madrid,
A Coruña, Valladolid, Oviedo, Santander, León o Ávila, y
de otros países como Portugal e Italia, que deseaban despedirse del año con los estudiantes de Salamanca.
Todos los
accesos de la Plaza Mayor
estaban controlados por sesenta agentes de la Policía Local y
Nacional para no dejar entrar nadie con bebidas alcohólicas o con vidrio. Los
policías recibieron la ayuda de los voluntarios que recogieron las botellas y
envases de vidrio y procedieron a su intercambio por vasos de plástico. A partir
de las diez de la noche, el
ambiente se volvió aún más navideño y se empezaron a distribuir los gorros y gominolas. Al mismo tiempo, DJ Javier Reina y el violista Miguel Lara comenzaron a excitar a los jóvenes y atraerlos a los ritmos del techno.
A las 12 de la
noche, con las campanadas, los asistentes degustaron las doce gominolas, que este año eran con forma y sabor a uva y "despidieron" 2011.
Tras las
campanadas, en apenas unos 20 minutos, el ágora salmantino se vació y la fiesta se trasladó a los bares de la ciudad o en los pisos
para hacer botellón. Este año participaron en total 67 bares, que habían comenzado a distribuir los tickets casi dos meses antes a un precio de 3 y 3,5 euros. Por lo tanto, con un montón de bebidas, buena música y el baile, la diversión continuó hasta la madrugada.
Así, Nochevieja Universitaria es
una experiencia única y merece la pena vivirla al menos una vez en la
vida porque es parte de la cultura de Salamanca. Esta vivencia se
vuelve aún más relevante e importante cuando uno viene
de un país extranjero, y eso es porque estos eventos
no existen en otros lugares.
Yo y mis amigos